jueves, 27 de noviembre de 2014

CREADOS MOSQUITOS CONTRA LA MALARIA QUE SOLO  CONCIBEN MACHOS.



La manipulación genética de los machos del mosquito anofeles ha conseguido, en condiciones de laboratorio, la erradicación de los insectos en seis generaciones. El objetivo del trabajo no es acabar con una especie: se trata del último intento para controlar los Anopheles gambiae,que son los que propagan la malaria.
El trabajo, realizado en el Imperial College de Londres y publicado en Nature Communications, se basa en la actividad de una enzima “desestabilizada”, según la describen los científicos: la I-Ppo-I. Esta máquina biológica tiene una propiedad: en la fase de la espermogénesis de los machos, altera el equilibrio entre los espermatozoides masculinos (con un cromosoma Y) y los femeninos (con uno X). Lo normal, estadísticamente, es que la producción de gametos de un macho se reparta al 50% entre los dos sexos, ya que estos se forman por división de las células del macho, que tienen un cromosoma de cada tipo (un X, el femenino, y un Y, el masculino).
Es en esa fase en la que actúa la enzima modificada: lo que consigue es que se produzca un ataque selectivo sobre los cromosomas X. El resultado es que a las hembras solo llegan espermatozoides Y, que, al unirse a los óvulos, tendrán como descendencia solo machos. De esta manera se ha conseguido acabar con la propagación de la especie en un tiempo récord: seis generaciones.
Los investigadores apuntan a que este nuevo sistema es de “2 a 70 veces más efectivo”. La causa es que, con estos machos que tienen los espermatozoides alterados, las hembras satisfacen su instinto de reproducirse, mientras que cuando se encuentran con un ejemplar estéril, al no producirse la fecundación continúan su búsqueda de otras parejas.
El ensayo, sin embargo, aún tiene que demostrar su eficacia en un entorno libre. En un laboratorio, donde no hay entrada de animales no manipulados, el resultado es claro, pero en la naturaleza el efecto distorsionador de los insectos modificados será menos evidente, ya que tendrán que competir con los machos normales para fecundar a las hembras.
Esta enfermedad, según la Organización Mundial de la Salud,causa alrededor de 220 millones de casos al año de los que mueren unos 660.000. Pero los mosquitos no son solo transmisores de enfermedades. También son un eslabón clave en la cadena alimentaria de numerosos animales (aves, peces, reptiles), que podrían verse afectados si desaparecen.
bibliografía:
http://sociedad.elpais.com/sociedad/2014/06/10/actualidad/1402416442_113893.html

1 comentario:

  1. ¡Super interesante! Podría ser el fin de esta enfermedad tan mortífera en países tropicales.

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